Ha pasado mucho tiempo desde la última vez que estuviste soltero. Por supuesto, la lección más importante que debes recordar es que es fundamental permanecer abierto a los demás y no juzgar a nadie demasiado rápido.
Con eso en mente, decidí compartir una historia divertida que encontré recientemente en línea. Se trata de una viuda de 70 años, un anuncio en el periódico y la búsqueda de un nuevo marido.
Estaba en casa un día cuando de repente sonó el timbre… sólo que no podía haber predicho quién estaría al otro lado.
Lea el divertido chiste completo a continuación y asegúrese de seguirlo hasta el remate.
Una solitaria viuda de 70 años decidió que era hora de volver a casarse…
Puso un anuncio en el periódico local que decía:
“¡Se busca marido! Debe estar en mi grupo de edad, no debe golpearme, no debe correr conmigo y aún así debe ser bueno en la cama. Todos los solicitantes deben presentar su solicitud en persona”.
Al día siguiente, escuchó el timbre. Para su consternación, abrió la puerta y vio a un caballero de cabello gris sentado en una silla de ruedas. No tenía brazos ni piernas.
“En realidad no me estás pidiendo que te considere, ¿verdad?” la viuda preguntó: “¡Mírate, no tienes piernas!”
El anciano sonrió: “¡Por lo tanto, no puedo andar por ahí contigo!”
“¡Tú tampoco tienes brazos!” ella resopló.