El ajo negro, un ingrediente menos conocido pero cada vez más popular, es simplemente ajo común que ha pasado por un proceso de fermentación. Mediante calor y humedad controlados durante varias semanas, los dientes de ajo se vuelven negros y desarrollan una textura suave y masticable con un sabor suave y ligeramente dulce. Este proceso de fermentación no solo cambia su sabor y textura, sino que también mejora ciertos beneficios para la salud, lo que lo convierte en un poderoso complemento para cualquier dieta. A continuación, se explica por qué el ajo negro es tan bueno para usted:
1. Rico en antioxidantes
El proceso de fermentación aumenta el contenido de antioxidantes del ajo negro. Los antioxidantes combaten los radicales libres en el cuerpo, lo que puede reducir el estrés oxidativo y disminuir el riesgo de enfermedades crónicas, como enfermedades cardíacas y ciertos tipos de cáncer.
2. Favorece la salud cardíaca
Se sabe que el ajo negro ayuda a reducir los niveles de colesterol, la presión arterial y mejora la circulación. Los antioxidantes del ajo negro ayudan a prevenir la acumulación de placa en las arterias, lo que reduce el riesgo de aterosclerosis y favorece la salud cardiovascular en general.
3. Mejora la función inmunológica
Al igual que el ajo común, el ajo negro tiene propiedades que estimulan el sistema inmunológico debido a sus compuestos de azufre, como la alicina. Sin embargo, la alicina del ajo negro es más estable debido a la fermentación, lo que significa que puede ser incluso más eficaz para mejorar la inmunidad y combatir las infecciones.
4. Propiedades antiinflamatorias
El ajo negro contiene S-alil cisteína (SAC), un compuesto que ha demostrado tener fuertes efectos antiinflamatorios. Su consumo regular puede ayudar a reducir la inflamación en el cuerpo, lo que beneficia a quienes padecen afecciones inflamatorias como la artritis.