¡Vierte las remolachas en la leche hirviendo! ¡Ya no voy a la tienda! Solo 3 ingredientes
Vierta la leche en una cacerola y déjela hervir suavemente a fuego medio.
Remueve de vez en cuando para evitar que la leche se queme en el fondo de la cacerola.
Agrega la remolacha:
Una vez que la leche comience a hervir, agrega la remolacha rallada a la sartén.
Reduzca el fuego y deje que la mezcla hierva a fuego lento durante unos 10 a 15 minutos, revolviendo ocasionalmente. Las remolachas infundirán a la leche su color vibrante y sus nutrientes.
Endulzar con miel:
Una vez que la remolacha se haya ablandado y la leche haya adquirido un bonito color rosado, retira la sartén del fuego.
Agregue de 1 a 2 cucharadas de miel, ajustándola a su nivel preferido de dulzura. La miel no sólo endulza la bebida, sino que también aporta sus propios beneficios para la salud.
Colar y servir:
Cuele la mezcla a través de un colador fino para quitar la pulpa de remolacha, dejando una bebida suave y colorida.
Vierta la leche de remolacha en un vaso y disfrútela tibia, o déjela enfriar y sírvala con hielo para disfrutar de un placer refrescante.
Beneficios de la salud: