Una mujer sin hogar hereda un viejo remolque abandonado… y el resultado de su transformación te sorprenderá.

Mientras consideraba ampliar su propiedad, un vecino llamó a su puerta con una oferta sorprendente. Una vieja caravana llevaba años en su jardín y ya no la usaba. En lugar de dejar que se oxidara, decidió regalársela a Mamá V.

Para ella, fue un verdadero regalo del destino.    «No es especialmente bonito, ¡pero es mío!»,    rió. Pero transformar esta caravana en un acogedor nido requirió tiempo, manos expertas… y algo de sacrificio.

Un proyecto de renovación lleno de corazón

Para financiar unas reformas, Mamá V tuvo que vender su minivan. Así que recurrió a la ayuda de dos amigos fieles, Jayme y Kevin. Juntos, se propusieron revitalizar esta caravana polvorienta.

 

 

 

 

continúa en la página siguiente

Leave a Comment