Toda la familia se vuelve loca cuando cocino esto.
1. Precalienta el horno a 200 °C (400 °F) y engrasa ligeramente una bandeja para hornear.
2. Corta las pechugas de pollo en trozos del tamaño de un bocado y colócalas en un tazón grande.
3. Quita el corazón y corta los pimientos en trozos de tamaño similar y agrégalos al tazón con el pollo.
4. Rocía el aceite de oliva sobre el pollo y los pimientos, luego espolvorea con ajo en polvo, pimentón ahumado, sal y pimienta. Revuelve para cubrir todo de manera uniforme.
5. Ensartarás los trozos de pollo y pimiento en las brochetas, alternando entre el pollo y los pimientos.
6. Coloca las brochetas en la bandeja para hornear preparada y hornea en el horno precalentado durante 20 a 25 minutos, o hasta que el pollo esté bien cocido y los pimientos estén tiernos.
7. Retira las brochetas del horno y espolvoréalas inmediatamente con queso cheddar rallado. Vuelve al horno durante 3 a 5 minutos más, o hasta que el queso se derrita y burbujee.
8. ¡Sírvelo caliente y disfruta de su delicioso sabor a queso!
Variaciones y consejos
Para darle un toque picante, prueba agregar algunos jalapeños cortados en cubitos a la mezcla de vegetales o espolvorea un poco de pimienta de cayena con tus condimentos. También puedes cambiar el queso cheddar por otros quesos como Monterey Jack o una mezcla de mozzarella y parmesano para obtener un perfil de sabor diferente. Si te gusta asar a la parrilla, estas brochetas se pueden cocinar fácilmente en una parrilla caliente en lugar de en el horno, solo asegúrate de vigilarlas para evitar que se cocinen demasiado.