Preparar las fresas: Lava y corta las fresas en trozos pequeños. Si prefieres, puedes triturarlas ligeramente con un tenedor o un procesador de alimentos para obtener un puré.
Hacer la crema: En un bol grande, bate la nata para montar con el azúcar y la esencia de vainilla (si la usas) hasta que quede espesa. Luego, agrega el mascarpone y mezcla suavemente hasta obtener una crema suave y homogénea.
Montar el tiramisú:
Baña los bizcochos de soletilla rápidamente en el jugo de naranja o café (ten cuidado de no empaparlos demasiado).
Coloca una capa de bizcochos en el fondo de un recipiente (puede ser una fuente rectangular o en copas individuales).
Cubre los bizcochos con una capa de crema de mascarpone.
Añade algunas fresas picadas o trituradas encima de la crema.
Repite las capas: bizcochos, crema y fresas, hasta que se termine la crema.
Decorar y enfriar: Termina con una capa de fresas y espolvorea cacao en polvo por encima. Si tienes tiempo, refrigéralo durante unos minutos antes de servir, aunque con el tiempo de preparación puedes disfrutarlo inmediatamente.
¡Listo! Ahora puedes disfrutar de un delicioso y refrescante tiramisú de fresa en solo 10 minutos.