Preparar la mantequilla:
Derretir 60 g de mantequilla en el microondas durante 1 minuto o al fuego. Dejar enfriar a temperatura ambiente.
Separar los huevos:
Separar los 4 huevos, colocando las yemas en un bol y las claras en otro.
Preparar las yemas:
En el bol de las yemas añadir 150 g de azúcar y 1 cucharadita de extracto de vainilla. Licue la mezcla durante 3-4 minutos hasta que esté suave y cremosa. Batir las claras:
En un recipiente aparte, batir las claras hasta que se formen picos rígidos. Dejar de lado.
Precalienta el horno:
Precalienta el horno a 160°C (320°F), usando el calor tanto de arriba como de abajo.
Combine los ingredientes:
agregue 250 g de mascarpone a la mezcla de yemas de huevo y mezcle hasta que quede suave. Agrega poco a poco la mantequilla derretida y mezcla bien.
Tamiza 120 g de harina en la mezcla, revolviendo suavemente hasta que se combinen.
Vierta lentamente 400 ml de leche, revolviendo constantemente para crear una masa suave.
Incorporar las claras:
Incorporar suavemente las claras batidas a la masa, mezclando de abajo hacia arriba hasta que queden bien incorporadas. La masa quedará fina.
Preparar el molde para bizcocho:
Humedece una hoja de papel de horno y forra con ella un molde para bizcocho de 20 cm. El papel mojado se adaptará fácilmente a la forma del molde para pasteles.
Hornee el pastel:
vierta la masa en el molde para pasteles preparado. Hornea en el horno precalentado durante 50 minutos, o hasta que la parte superior esté dorada y el bizcocho cuaje.
Dejar enfriar y decorar:
Una vez horneado, deja que el pastel se enfríe completamente en el molde. Espolvoree con azúcar glas antes de servir.
Servir:
Corta el pastel para revelar las tres capas mágicas: una base de pudín, un centro cremoso y un pastel ligero encima. ¡Disfruta de este delicioso postre!
Sugerencias para servir
Sirva el pastel frío o a temperatura ambiente con una cucharada de crema batida o frutos rojos frescos.
Acompáñelo con una taza de café o té para disfrutar de una deliciosa experiencia de postre.
Consejos de cocina
Asegúrate de que la mantequilla se haya enfriado antes de agregarla a la masa para evitar que se cuaje.
Incorpora suavemente las claras a la mezcla para mantenerla aireada, lo cual es esencial para las tres capas del pastel.
Utilice un molde desmontable para retirarlo fácilmente y presentarlo de forma limpia.
Beneficios Nutricionales
Este pastel es una rica fuente de calcio proveniente de la leche y el mascarpone.
Los huevos aportan una buena cantidad de proteínas. Es mejor disfrutarlo con moderación como parte de una dieta equilibrada.
Información dietética
Esta receta contiene lácteos y gluten.
Para una versión sin gluten, reemplace la harina con una mezcla para hornear sin gluten.
Información nutricional (por rebanada, basado en 8 rebanadas)
Calorías: aproximadamente 270 kcal
Proteína: 6 gramos
Carbohidratos: 26 gramos
Grasa: 16 gramos
Fibra: 0 gramos
Almacenamiento
Guarde el pastel en el refrigerador hasta por 3 días.
El bizcocho se puede servir frío o llevar a temperatura ambiente antes de servir.
Por qué te encantará esta receta
Este pastel es fácil de hacer pero es un postre impresionante de varias capas.
La combinación de mascarpone cremoso y un pastel ligero y esponjoso lo convierte en una delicia.
Es lo suficientemente versátil tanto para ocasiones especiales como para reuniones informales.
Las distintas capas brindan una experiencia de textura y sabor única en cada bocado. Conclusión
El Pastel Mágico de Tres Texturas con Mascarpone es un postre que debes probar, visualmente impactante y delicioso. Su mágica transformación en el horno crea una deliciosa combinación de texturas que sorprenderá a quien lo pruebe. Fácil de preparar y absolutamente delicioso, este pastel es perfecto para cualquier ocasión. ¡Pruébalo y disfruta de la magia en cada bocado!