Ahora aquí te dejamos el paso a paso para preparar este delicioso pastel:
- Comienza precalentando el horno a 180°C en modo estático. Este paso es importante para garantizar que el pastel se cocine de manera uniforme.
- Pese y mida todos sus ingredientes con precisión. Este paso garantiza el éxito de tu tarta respetando las proporciones.
- Tamizar los ingredientes en polvo. Este proceso elimina los grumos y da como resultado una masa más ligera y aireada.
- Lavar los albaricoques con cuidado, quitarles los huesos y cortarlos en rodajas. Cortar los albaricoques en rodajas los distribuye uniformemente por todo el bizcocho.
- Batir los huevos con el azúcar hasta obtener una crema blanca. Esta técnica, llamada “hervir” los huevos, contribuye a la ligereza del bizcocho.
- Luego agrega el yogur y el aceite a la mezcla de huevo y azúcar y mezcla bien. Estos ingredientes ayudarán a lograr una textura de pastel increíblemente húmeda.
- Incorpora poco a poco los polvos tamizados, la ralladura de limón y finalmente dos tercios de los albaricoques laminados. La mezcla debe quedar homogénea, pero evita mezclar demasiado para no obtener una pasta demasiado densa.
- Vierte la mezcla en un molde de plumcake previamente enmantecado y enharinado. Estas preparaciones evitan que el bizcocho se pegue al molde y facilitan su desmolde.
- Coloca los gajos de albaricoque restantes encima del bizcocho y espolvorea con las almendras fileteadas. Este paso le da a tu pastel un aspecto rústico y atractivo.
- Cocina el bizcocho durante 30 minutos a 180°C. Comprueba el horneado con un palillo: si sale limpio, tu bizcocho está cocido.
- Una vez cocido el bizcocho, retíralo del horno y déjalo enfriar antes de desmoldar. Luego déjalo enfriar completamente sobre una rejilla. Este paso es fundamental para evitar que la tarta se deshaga durante el desmolde.
- Justo antes de servir, espolvorea tu pastel de yogur y albaricoque con azúcar glas para darle un toque extra de dulzura y una presentación refinada.
Esta tarta de yogur con albaricoques y copos de almendras es una explosión de sabores que hará las delicias de todos los paladares. La textura húmeda, el sabor afrutado y la corteza crujiente hacen de este postre imprescindible para postres sencillos pero sabrosos. ¡Feliz degustación y diviértete en la cocina!