- Haga la cobertura:
En una sartén antiadherente de 20 cm (8 pulgadas), derrita la mantequilla sin sal a fuego lento.
Agrega el azúcar sin refinar (o azúcar regular) y revuelve hasta que comience a derretirse y formar un caramelo ligero. Tardará unos 5 minutos.
Cortar los plátanos en rodajas y disponerlos en una sola capa sobre el azúcar caramelizada. Déjalas cocer a fuego lento durante unos minutos hasta que empiecen a ablandarse y caramelizarse ligeramente. 2. Prepara la masa del pastel:
En un bol, bate el huevo y el azúcar hasta que quede suave y esponjoso.
Agrega la leche, la sal y el extracto de vainilla, mezclando hasta que quede suave.
Tamice la harina y el polvo para hornear y luego agréguelos suavemente a los ingredientes húmedos hasta que quede suave.
Agregue aceite vegetal hasta que quede suave. - Armar y hornear:
Vierta con cuidado la masa del pastel sobre los plátanos caramelizados en el molde, distribuyéndola uniformemente.
Tapar la cacerola con una tapa y cocinar a fuego muy lento durante unos 25 minutos. Este fuego lento permite que el pastel se cocine sin quemar el fondo.
Después de 25 minutos, revisa el bizcocho introduciendo un palillo en el centro. Si sale limpio el bizcocho está cocido. Si no, continúa cocinando por otros 5 minutos. - Enfriar y servir:
Una vez cocido el bizcocho, retira el molde del fuego y déjalo enfriar unos minutos. Con cuidado, invierta el molde sobre un plato para aflojar el pastel, permitiendo que la cobertura de plátano se vea en la parte superior.
Servir caliente o a temperatura ambiente. Este bizcocho está delicioso solo o con una cucharada de nata montada o una bola de helado de vainilla.
Consejos de cocina:
Utilice plátanos maduros: Para obtener el mejor sabor y textura, utilice plátanos muy maduros. Se caramelizarán maravillosamente y agregarán una rica dulzura al pastel.
Cocer a fuego lento: Cocer a fuego lento el pastel es clave para garantizar que se cocine de manera uniforme y no se queme. La paciencia es la clave de esta receta.
Molde antiadherente: Utilice un molde antiadherente para que sea más fácil voltear el pastel y asegurarse de que los plátanos no se peguen.
Beneficios nutricionales:
Este pastel de plátano al revés es una delicia deliciosa con algunos beneficios nutricionales. Los plátanos son ricos en potasio y vitaminas, que aportan un dulzor natural y añaden humedad al pastel. La receta es relativamente baja en grasa en comparación con otros pasteles, especialmente si se usa una pequeña cantidad de mantequilla y aceite. Disfrutar este pastel con moderación lo convierte en un postre o refrigerio satisfactorio.
Por qué te encantará esta receta:
Te encantará esta receta por su simplicidad y el delicioso aderezo de plátano caramelizado que agrega una capa extra de sabor al pastel suave y húmedo. Es perfecto para los amantes de los postres rápidos, fáciles y que no requieren muchos ingredientes ni tiempo. El resultado es un pastel delicioso y visualmente atractivo que seguramente sorprenderá a su familia y amigos.
Información dietética:
Apto para vegetarianos: Esta receta es apta para vegetarianos ya que no contiene productos animales, a excepción de huevos y lácteos.
Personalizable: Puedes ajustar el dulzor y añadir diferentes sabores como canela o nuez moscada según tus preferencias.
Opción baja en grasas: para hacer una versión baja en grasas, puedes reemplazar un poco de mantequilla y aceite con puré de manzana o yogur.
Por qué funciona esta receta:
Esta receta funciona porque combina ingredientes simples en un método simple para crear un postre delicioso. Los plátanos caramelizados proporcionan un aderezo rico y dulce que combina perfectamente con el tierno pastel. Cocinar a fuego lento asegura que el bizcocho se cocine uniformemente sin quemarlo, y como utiliza ingredientes básicos que se encuentran en la despensa, esta preparación es accesible para cualquier panadero casero.