- Preparar los ingredientes:
- Lava y seca las hojas de lechuga. Reserva las más grandes para forrar el molde.
- Corta en rodajas finas el rábano, el nabo, los tomates y las cebollas.
- Pica los huevos cocidos en rebanadas o cubos.
- Corta el puerro en rodajas finas.
- Montaje en el molde:
- Usa un molde desmontable de 24 cm de diámetro.
- Cubre la base del molde con las hojas de lechuga, dejando que sobresalgan un poco por los bordes.
- Coloca capas de los ingredientes, alternando queso, jamón, huevos, rábanos, nabo, cebolla, tomate y puerro. Repite hasta llenar el molde.
- Presiona ligeramente cada capa con una cuchara para compactar.
- Cierre de la tarta:
- Coloca las hojas de lechuga que sobresalen sobre la última capa, cubriendo completamente la tarta.
- Refrigera durante al menos 2 horas para que se compacte bien.
- Servir:
- Justo antes de servir, desmolda con cuidado volteando la tarta sobre un plato grande.
- Decora con tomates cherry, rábanos o unas hojas frescas de perejil.
- Aderezo:
- Mezcla todos los ingredientes del aderezo y ajusta los sabores a tu gusto.
- Sirve el aderezo aparte o vierte un poco sobre la tarta antes de cortarla.
Consejos para mejorar el sabor:
- Añade textura: Incorpora nueces picadas o semillas entre las capas para un toque crujiente.
- Realza el sabor: Marina los rábanos en un poco de vinagre de manzana con una pizca de sal antes de colocarlos en la tarta.
- Sabor ahumado: Usa jamón ahumado o agrégale un toque de pimentón ahumado al aderezo.
- Variante vegetariana: Sustituye el jamón por rodajas de aguacate o queso feta desmenuzado.
- Acompañamientos: Sirve con panes crujientes o tostadas para un extra de contraste.
Esta tarta de ensalada no solo es visualmente atractiva, sino también versátil y deliciosa. Perfecta para sorprender a tus invitados en una parrillada o reunión. ¡Disfrútala!