Preparación
Para hacer una tarta de queso blanco alsaciano, sigue atentamente estos sencillos pasos:
- Preparar la masa:
- Mezclar la harina y la mantequilla hasta obtener una consistencia arenosa.
- Agrega el huevo y mezcla bien.
- Forma una bola con la masa y déjala reposar durante 30 minutos.
- Prepare la cobertura:
- En un bol mezclar la harina y los azúcares.
- Añade el queso blanco, la nata espesa, la leche y las yemas de huevo. Mezclar hasta obtener una consistencia homogénea.
- En otro bol batir las claras a punto de nieve con unas varillas.
- Añade suavemente las claras a la mezcla de queso blanco.
- Armar y hornear:
- Transfiera la masa a un molde para tarta de 28 cm de diámetro por 6 cm de alto, asegurándose de que cubra todo el molde.
- Hornear la tarta en dos tiempos: 30 minutos a 180°C, luego 60 minutos a 155°C.
- Retirar del horno, invertir la tarta sobre una rejilla y dejar enfriar.
- Acabado :
- Espolvorea la tarta enfriada con azúcar glas para darle un toque extra de dulzura.
- Saboreo:
- Disfrute de la tarta de queso blanco alsaciano una vez fría, en generosas lonchas.
Siguiendo estos pasos al pie de la letra obtendrás una tarta deliciosa y jugosa que hará las delicias de tu paladar y el de tus invitados. ¡Buena preparación!
Consejos y trucos
Para garantizar el éxito de su tarta de requesón alsaciano, siga estos prácticos consejos:
- Precisión de medición: mida con precisión los ingredientes para lograr la textura y el sabor perfectos.
- Preparación de la masa: Asegúrese de lograr una consistencia arenosa al preparar la masa para obtener una base crujiente y deliciosa.
- Batir las claras de huevo: Batir las claras hasta que estén firmes para obtener una textura ligera y aireada en el relleno.
- Cocción en dos etapas: Respete los tiempos y temperaturas de cocción para obtener un pastel cocinado a la perfección.
- Enfriar antes de comer: Deje que la tarta se enfríe sobre una rejilla antes de espolvorearla con azúcar glas y comerla para obtener una mejor textura.
Sugerencias
Esta tarta alsaciana de requesón combina perfectamente con una taza de té o café caliente. También puedes servirlo con un toque de crème fraîche extra para una experiencia aún más deliciosa. Agregue fruta fresca, como fresas o frambuesas, para obtener una nota picante que complementará perfectamente la dulzura de la tarta.