Remueva el tallo del chile, las venas y las semillas.
Tueste el chile levemente en una sartén a fuego mediano durante 2-3 minutos. Colóquelo en un tazón de cristal y agregue el agua hirviendo. Cubra con plástico y deje reposar durante 10 minutos. Saque del agua y coloque a un lado.
Ase el pimentón directamente sobre el fuego de la hornilla, rotándolo hasta que la superficie quede negra. Coloque en una bolsa de papel durante 10 a 15 minutos. Sáquelo y limpie con las manos, quitándole piel, venas y semillas. No lo enjuague.
Tueste el ajo en una sartén pequeña durante cinco minutos a fuego mediano-bajo, volteándolo de vez en cuando.
En un procesador de alimentos, eche las almendras y el pan y muela. Agregue el chile, pimentón, tomate, ajo, paprika, sal, pimienta, vinagre y procese. Cuando adquiera la consistencia de puré, agregue muy lentamente el aceite de oliva, sin dejar de batir, mientras la salsa se emulsifica.
