Empezamos encendiendo el horno y precalentándolo a 180 grados. Luego cogemos un bol grande y vertemos en él el yogur griego. Añadimos entonces los tres huevos, el extracto de vainilla y el aceite de coco. Mezcla estos ingredientes con una espátula de cocina.
Trabajamos unos minutos y cuando la mezcla adquiera una consistencia aterciopelada y uniforme echamos la harina de almendras (200 gramos), la stevia (60 gramos), la levadura (8 gramos) y una pizca de sal. Ahora mezcla todo junto, siempre con una espátula de cocina.
Cuando la mezcla alcance la densidad y consistencia adecuada la vertemos poco a poco en un molde de plum cake (por ejemplo de 30 x 10) que habremos forrado con papel de horno.
Bueno, llegados a este punto lo único que nos queda es meterlo al horno a 180 grados durante digamos tres cuartos de hora.
Luego sacamos el bizcocho del horno, lo dejamos enfriar y luego lo espolvoreamos, si queréis, con cacao amargo en polvo o con coco rallado. Depende de los gustos de cada uno.
En este punto lo único que podemos hacer es desearte lo mejor.
¡Buen trabajo, diviértete y buen provecho!
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