Sobre una tabla picamos finamente las espinacas, luego la cebolla y el ajo y lo llevamos en una sartén con aceite durante 5 minutos.
Mezclamos los huevos con leche y luego agregamos la harina, la sal, la pimienta, las espinacas cocidas, el queso en fetas y el perejil.
Transferimos la mezcla a una bandeja previamente engrasada y luego le añadimos queso mozzarella rallado encima.
Introducimos la mezcla dentro de un horno previamente precalentado a 180°C durante 25 minutos.
Una vez cocinado, retiramos del horno y a disfrutar.
Tips
Usa espinacas frescas para un mejor sabor y textura. Si usas espinacas congeladas, asegúrate de descongelarlas y escurrir todo el exceso de agua. Las espinacas frescas deben ser lavadas y picadas antes de usar.
Aparte de sal y pimienta, añade nuez moscada, ajo en polvo, cebolla en polvo, y hierbas frescas como perejil, albahaca o eneldo para dar más sabor.
Si usas espinacas frescas, escúrrelas bien después de saltearlas para evitar que la cazuela quede acuosa. Presiona las espinacas en un colador para eliminar toda el agua posible.
Deja reposar la cazuela durante unos 10 minutos antes de cortarla y servirla. Esto permite que se asiente y facilita el corte.