- Precalienta el horno a 180°C (350°F) y engrasa un molde para pastel o cúbrelo con papel vegetal para evitar que se pegue.
- Prepara la avena: En un bol pequeño, mezcla los copos de avena con el agua. Déjalos reposar unos 10 minutos para que absorban el líquido y se hidraten, logrando una textura más suave.
- Ralla las manzanas: Pela las manzanas y rállalas finamente. Esto permitirá que se integren mejor a la masa y le den humedad al pastel.
- Mezcla los ingredientes húmedos: En un bol grande, bate los huevos y añade el plátano triturado. Incorpora las manzanas ralladas y mezcla todo bien.
- Añade la avena: Una vez que los copos de avena hayan absorbido el agua, agrégales la levadura química y remueve. Luego, incorpora esta mezcla al bol con los ingredientes húmedos.
- Añade los frutos secos y las pasas: Incorpora las nueces o almendras picadas y las pasas a la mezcla, removiendo suavemente hasta que todo esté bien integrado.
- Endulza al gusto (opcional): Si prefieres un pastel más dulce, puedes añadir un poco de edulcorante en polvo o simplemente espolvorear azúcar glas por encima una vez que el pastel esté listo.
- Hornea: Vierte la mezcla en el molde preparado y hornea durante 30-35 minutos, o hasta que al insertar un palillo en el centro, salga limpio.
- Deja enfriar: Saca el pastel del horno y deja que se enfríe en el molde unos 10 minutos antes de desmoldarlo. Luego, colócalo en una rejilla para que se enfríe por completo.
Este pastel es perfecto para quienes buscan una opción ligera y nutritiva, ideal para acompañar con un té o café. Además, es naturalmente dulce gracias a las frutas, lo que lo convierte en una excelente alternativa para quienes quieren evitar el azúcar. ¡Pruébalo y verás lo fácil que es cuidarse sin renunciar al sabor!
Consejos
Aquí tienes 4 consejos para que tu pastel de avena y manzana bajo en calorías salga perfecto:
- Elige manzanas jugosas: Usa manzanas como la variedad Golden o Granny Smith, que aportan un buen equilibrio entre dulzor y acidez, además de humedad natural, lo que hará que el pastel quede más suave y húmedo.
- Tritura bien el plátano: Asegúrate de que el plátano esté completamente triturado y sin grumos. Esto ayudará a endulzar de manera uniforme el pastel, además de darle una textura cremosa.
- No sobrebatas la mezcla: Al mezclar los ingredientes, hazlo suavemente y no batas en exceso, especialmente después de añadir la levadura. Así evitarás que el pastel pierda esponjosidad.
- Deja reposar la masa unos minutos antes de hornear: Darle unos 5-10 minutos de reposo a la masa antes de meterla al horno permitirá que la avena se hidrate mejor, lo que ayudará a lograr una textura más tierna.
