- Precalienta el horno: Precalienta tu horno a 180°C (350°F). Engrase y forre un molde para pasteles redondo con papel pergamino.
- Prepare la masa para pastel:
- En un tazón grande, bata las yemas de huevo con el azúcar hasta que estén pálidas y cremosas.
- Agregue gradualmente la harina y el aceite vegetal, mezclando hasta que estén bien combinados.
- En un recipiente aparte, bata las claras hasta que se formen picos rígidos. Incorpora suavemente las claras batidas a la mezcla de yemas hasta que estén completamente incorporadas.
- Hornea las capas de pastel:
- Vierta la masa en el molde para pasteles preparado y extiéndala uniformemente.
- Hornee en el horno precalentado durante unos 20-25 minutos o hasta que al insertar un palillo en el centro, éste salga limpio.
- Saca el bizcocho del horno y déjalo enfriar completamente sobre una rejilla.
- Preparar el relleno:
- En un tazón, combine el queso mascarpone y la pasta de chocolate hasta que quede suave y cremoso.
- Picar las avellanas en trozos pequeños.
- Armar el pastel:
- Una vez que las capas del pastel se hayan enfriado, corte con cuidado cada capa horizontalmente en dos capas iguales.
- Coloque una capa de pastel en un plato para servir o en un soporte para pasteles. Extienda una capa de relleno de chocolate y mascarpone uniformemente sobre el pastel.
- Espolvorea unas avellanas picadas sobre el relleno. Repita este proceso con las capas restantes del pastel y el relleno, apilándolas una encima de la otra.
- Termine extendiendo una fina capa de relleno de chocolate y mascarpone sobre la parte superior y los lados del pastel.
- Enfriar y servir:
- Refrigere el pastel ensamblado durante al menos 2-3 horas para permitir que se asiente el relleno.
- Una vez frío, cortar el bizcocho en rodajas y servir. ¡Disfruta de tu delicioso y bonito bizcocho vertical de chocolate y avellanas!
Este pastel simple pero impresionante seguramente será un éxito entre tu familia y amigos. ¡Disfruta cada bocado delicioso de este delicioso postre!