En una licuadora, coloque la cebolla y parte del aceite y licúe bien. Agregue el ajo, el cebollín, el cilantro, el jengibre y el resto del aceite. Licúe bien y finalmente agregue la sal. Licúe un poco más y listo.
Guarde en un frasco mediano en el refrigerador y use en guisos, sopas, arroces, carnes, etc. Tenga en cuenta que ya tiene sal, por lo que al cocinar se utiliza poca o casi nada de sal. También se puede colocar en una bandeja de cubitos de hielo y congelar, utilizando un cubo cuando sea necesario. (Validez de 3 meses congelado).