- Preparar el horno y el molde:
- Precalienta el horno a 180°C (350°F).
- Engrasa un molde con los 20 g de mantequilla y espolvorea con un poco de harina para evitar que la tarta se pegue.
- Mezclar los ingredientes secos:
- En un bol grande, tamiza la harina y la levadura en polvo.
- Añade el azúcar y mezcla bien.
- Preparar la mezcla húmeda:
- Derrite la mantequilla semisal y déjala enfriar un poco.
- En otro bol, bate los huevos y luego añade la leche y la mantequilla derretida, mezclando hasta que estén bien combinados.
- Unir las mezclas:
- Vierte la mezcla húmeda en el bol con los ingredientes secos y mezcla hasta obtener una masa homogénea.
- Hornear:
- Vierte la masa en el molde preparado y hornea durante unos 30-35 minutos, o hasta que al insertar un palillo en el centro, este salga limpio.
- Enfriar y servir:
- Deja enfriar la tarta antes de desmoldarla. Puedes decorarla con azúcar glas o disfrutarla tal cual.
Este método es ideal para quienes buscan una tarta sencilla pero deliciosa. ¡Perfecta para cualquier ocasión!