- Preparar los ingredientes:
- Pela y corta el plátano en rodajas.
- Si usas avena tradicional, puedes ponerla en el vaso de la licuadora junto con el resto de los ingredientes. Si usas avena instantánea, puedes licuarla directamente o remojarla previamente por unos 5-10 minutos en agua para suavizarla un poco.
- Licuar:
- Coloca el plátano, la avena, el cacao en polvo, la miel (si la usas), la leche, el agua y la esencia de vainilla (si decides agregarla) en la licuadora.
- Licúa a alta velocidad hasta obtener una mezcla suave y homogénea. Si lo prefieres más líquido, añade más agua o leche.
- Ajustar al gusto:
- Si deseas un smoothie más frío o espeso, puedes agregar hielo y licuar nuevamente hasta obtener la textura deseada.
- Si necesitas un toque más dulce, ajusta con más miel o edulcorante.
- Servir:
- Sirve el smoothie en un vaso grande. Puedes decorarlo con rodajas de plátano, un poco de cacao espolvoreado o incluso un poco de chispas de chocolate para un toque extra.
¡Disfruta tu smoothie de avena con chocolate y plátano!
Es una combinación deliciosa que te aporta fibra, potasio, antioxidantes y energía para comenzar el día con fuerza o recargar energías durante la tarde.