Paso 1
En una olla grande calienta el agua y agrega el maíz, la cebolla, el ajo, la sal y la pechuga cruda.
Paso 2
Comienza a cocinar con fuego medio el maíz hasta que empiece a florear y el pollo este blando. Algunas veces es necesario colocar más agua caliente.
Paso 3
Luego, retira el caldo de la cebolla y comienza a mechar el pollo.
Paso 4
Para preparar la salsa, debes poner en remojo con anterioridad los chiles, aproximadamente 30 minutos. Además, agregarle agua suficiente para cubrirlos todos.
Paso 5
Después, que los chiles tengas una contextura blanda, debes escurrirlos. Licúalos hasta formar una pasta y, agrega lentamente el agua donde se cocinaron para forma una salsa suave.
Paso 6
Calienta el aceite en un sartén a temperatura media alta, agrega la salsa y la sal al gusto. Recuerda, revolver constantemente, ya que la salsa tiende a brincar.
Paso 7
Reduce, hirviendo a fuego lento por aproximadamente 25 minutos. Posteriormente, agrega la salsa al caldo, pasándola por un colador.
Paso 8
Deja que suelte el hervor y luego vuelve a hervir a fuego bajo por aproximadamente 10 minutos.
Paso 9
El pozole se acostumbra a servir el plato hondo. Además, se agrega poco en tiras para decorar.
Recuerda que hay varios tipos de pozole, lo más comunes son el blanco, verde y rojo, de hecho su color varía debido a los chiles que se utilice. Además, de ser muy rico el pozole tiene una cantidad enorme de nutrientes; también, es rico en vitaminas, minerales y fibra.
Por último, para hacer del pozole un plato balanceado debes lograr un equilibrio entre las verduras y la carne. Anímate a probarlo y cuéntanos qué te pareció.