- Preparar el hojaldre:
Precalienta el horno a 200°C.
Estira las láminas de hojaldre en una superficie ligeramente enharinada y córtalas en rectángulos iguales (aproximadamente de 8×10 cm). Puedes usar un cortador o un cuchillo afilado.
Coloca los rectángulos de hojaldre en una bandeja de horno forrada con papel de horno.
Pincha la superficie de cada rectángulo con un tenedor para evitar que suban demasiado.
- Hornear el hojaldre:
Pincela ligeramente cada pieza de hojaldre con la mantequilla derretida.
Hornea durante 12-15 minutos, o hasta que los rectángulos estén dorados y crujientes.
Retíralos del horno y deja enfriar sobre una rejilla.
- Preparar las manzanas:
Pela y corta las manzanas en rodajas finas.
En un bol, mezcla las rodajas de manzana con azúcar y canela.
Coloca las manzanas en una bandeja de horno y hornéalas a 180°C durante 10-15 minutos hasta que se ablanden ligeramente.
- Montaje:
Una vez que el hojaldre y las manzanas estén listos y fríos, empieza a montar las milhojas.
Coloca una capa de hojaldre, luego una capa de rodajas de manzana horneadas. Repite este proceso hasta tener 3-4 capas de hojaldre y manzana alternadas.
- Decorar:
Espolvorea azúcar glas sobre las milhojas para un toque final.
- Servir:
Sirve las milhojas de manzana a temperatura ambiente o ligeramente tibias. Acompáñalas con un poco de crema batida o helado si lo deseas.
Este postre es perfecto para cualquier ocasión y resalta la frescura de las manzanas con la textura crujiente del hojaldre. ¡Disfrútalo!