Haga la masa:
En un tazón grande, mezcle la harina para pan, la levadura instantánea y el azúcar.
Agrega el huevo y la leche a los ingredientes secos, mezclando hasta que se forme una masa rugosa. Agrega sal y 20 g de mantequilla sin sal a la masa, amasando hasta que la masa quede suave y elástica.
Deja reposar la masa durante 10 minutos.
Dividir y darle forma:
Dividir la masa en 9 partes iguales, de 60 gramos cada una aproximadamente.
Enrolle cada pieza hasta formar una bola y luego aplánela hasta formar un disco de unos 20 cm de diámetro.
Capas de mantequilla:
Tome los 90 g de mantequilla sin sal y divídalos en 8 porciones iguales, de unos 11 gramos cada una.
Coloque los discos de masa en capas, esparciendo 11 gramos de mantequilla entre cada capa.
Apila las capas y extiéndelas hasta formar un disco grande de unos 40 cm de diámetro.
Enfriar la masa:
Si es verano congelar la masa unos 20 minutos. Si es invierno, refrigere por 20 minutos para endurecer las capas de mantequilla.
Enrollar y darle forma:
Use un rodillo más grueso para extender la masa de manera uniforme, volteándola ocasionalmente para asegurar un espesor uniforme. Estirar hasta que la masa adquiera una forma redonda de aproximadamente 40 cm de diámetro.
Fermentación:
Dejar fermentar la masa durante 2-3 horas a una temperatura no superior a 28°C. La masa debe hincharse y moverse ligeramente al moverla.
Cocción:
Precalienta el horno a 200°C (390°F). Hornea los croissants durante 10 minutos.
Reduzca la temperatura a 180°C (355°F) y cocine por 6 minutos más hasta que se doren.
Sugerencias para servir
Sirva caliente con mantequilla y mermelada.
Disfrútalo con una taza de café o té para un delicioso desayuno o merienda.
Consejos de cocina
Asegúrese de que todos los ingredientes, especialmente la mantequilla, estén fríos para evitar que se derrita prematuramente en la masa.
Estire la masa de manera uniforme para asegurar capas uniformes y un crecimiento adecuado.
Beneficios nutricionales
Harina Panificable: Aporta proteínas y estructura.
Huevo: Agrega riqueza y proteínas.
Mantequilla: fuente de grasa y sabor.
Información dietética
Esta receta contiene gluten, lácteos y huevos.
Para una versión sin lácteos, reemplace la mantequilla y la leche con alternativas vegetales adecuadas.
Consejos de almacenamiento
Guarde los croissants sobrantes en un recipiente hermético a temperatura ambiente hasta por 2 días.
Para conservarlos por más tiempo, congela los croissants y recaliéntalos en el horno antes de servirlos.
Por qué te encantará esta receta
El proceso de elaboración de croissants es gratificante y produce un hojaldre superior al de las versiones compradas en la tienda.
Las capas hojaldradas y mantecosas son perfectas para disfrutar de una delicia casera.
Personalizable con diferentes rellenos como chocolate o pasta de almendras.
Conclusión
Hornear croissants en casa es un trabajo de amor que da como resultado un hojaldre irresistiblemente hojaldrado y delicioso. Sigue estos pasos y consejos para disfrutar de croissants caseros frescos, perfectos para cualquier ocasión. ¡Buen provecho!
