Prepara la fuente para horno:
Cubre una fuente para horno de 8×8 con papel de pergamino. Déjala a un lado.
Derrite el chocolate y la mantequilla de maní:
Derrite las chispas de chocolate y la mantequilla de maní a baño María. Revuelve hasta que la mezcla esté suave. Déjala a un lado.
Prepara la mezcla de avena:
En una olla grande, derrite la mantequilla a fuego medio. Agrega el azúcar morena hasta que la mezcla esté suave.
Agrega la sal y el extracto de vainilla.
Apaga el fuego y agrega la avena hasta que esté bien combinada.
Arma las barras:
Transfiere dos tercios de la mezcla de avena a la fuente para horno preparada. Presiónala firmemente hasta formar una capa uniforme para crear una corteza sólida.
Vierte tres cuartos de la mezcla de chocolate sobre la corteza de avena y extiéndela hasta formar una capa uniforme.
Desmenuza la mezcla de avena restante sobre la capa de chocolate en una capa uniforme.
Rocía la mezcla de chocolate restante sobre la parte superior.
Enfría las barras:
Transfiere las barras al refrigerador para que se asienten durante aproximadamente 2 horas.
Sirve:
Una vez que estén listas, corta las barras en cuadrados y sirve inmediatamente.
Guarda las sobras en el refrigerador hasta por 5 días.
Sugerencias para servir:
Sirve estas barras como un refrigerio dulce o un postre.
Acompáñalas con un vaso de leche fría o una taza de café para un capricho extra.
Disfrútalas directamente del refrigerador para un bocado refrescante y satisfactorio.
Consejos de cocina:
Usa un baño maría para derretir suavemente el chocolate y la mantequilla de maní y evitar que se quemen.
Presiona la mezcla de avena con firmeza para asegurarte de que las barras se mantengan bien unidas.
Para una variación, agrega un puñado de nueces picadas o frutas secas a la mezcla de avena.
Beneficios nutricionales:
La avena es una gran fuente de fibra dietética y puede ayudar con la digestión.
La mantequilla de maní proporciona grasas saludables y proteínas, lo que puede ayudar a mantenerte lleno por más tiempo.
El chocolate negro (si usas semidulce) contiene antioxidantes y puede mejorar la salud del corazón.
Información dietética:
Esta receta no contiene gluten si usas avena certificada sin gluten.
Para que no contenga lácteos, usa chispas de chocolate sin lácteos y un sustituto de mantequilla de origen vegetal.
Almacenamiento:
Guarda las barras en un recipiente hermético en el refrigerador hasta por 5 días.
Para conservarlas durante más tiempo, congela las barras hasta por 1 mes. Descongélalas en el refrigerador antes de servirlas.
Por qué te encantará esta receta:
Fácil de hacer: Los pasos simples y el hecho de que no requiere horneado hacen que esta receta sea rápida y fácil.
Deliciosa: La combinación de chocolate, mantequilla de maní y avena crea un bocadillo rico y satisfactorio.
Versátil: Ideal para cualquier ocasión, desde bocadillos hasta postres.
Nutritivo: lleno de fibra, proteínas y grasas saludables.
Conclusión:
estas barras de avena con mantequilla de maní y chocolate son un bocadillo delicioso y fácil de preparar que satisfará tu gusto por lo dulce y te proporcionará un refrigerio nutritivo. Disfruta de los ricos sabores y texturas en cada bocado y compártelos con familiares y amigos para disfrutar de un delicioso bocadillo.