- Prepara la salsa de caramelo:
en una cacerola mediana, combina el azúcar y el agua. Cocine a fuego medio, revolviendo ocasionalmente, hasta que el azúcar se disuelva.
Aumenta el fuego y deja que la mezcla hierva. No mezclar. Déjelo cocinar hasta que la mezcla adquiera un color ámbar intenso (aproximadamente 10 minutos).
Agrega con cuidado la nata montada (la mezcla empezará a hervir). Mezclar hasta que quede suave.
Retire del fuego y agregue la mantequilla hasta que esté completamente derretida y combinada. Reservar y dejar enfriar un poco. - Prepara los cacahuetes:
Coloca los cacahuetes tostados en un bol grande. - Combine maní y caramelo:
vierta la salsa de caramelo ligeramente enfriada sobre los maní. Revuelva hasta que los cacahuetes estén cubiertos uniformemente de caramelo. - Formar los manojos:
Forrar una bandeja para horno con papel de horno.
Deje caer cucharadas de maní caramelizado sobre el papel de hornear, formando racimos. - Derretir el chocolate:
Picar el chocolate con leche y derretirlo a baño maría (colocar el chocolate en un recipiente resistente al calor sobre agua hirviendo) o en el microondas en intervalos de 20 segundos, revolviendo entre cada vuelta hasta que quede suave.
Una vez derretido, vierte el chocolate con leche sobre los racimos. - Coberturas (opcional):
Derrita el chocolate amargo usando el mismo método que el chocolate con leche. Espolvorea chocolate amargo sobre los racimos cubiertos de chocolate con leche para darle un toque decorativo. - Preparar y servir:
Deje que los racimos se solidifiquen completamente a temperatura ambiente o colóquelos en el refrigerador para acelerar el proceso.
Una vez solidificados, guarde los racimos en un recipiente hermético a temperatura ambiente o en el refrigerador.
Por qué te encantará esta receta:
Rica e indulgente: la combinación de caramelo, maní y chocolate crea una delicia verdaderamente deliciosa.
Fácil de hacer: con ingredientes simples y pasos sencillos, esta receta es perfecta para cualquier nivel de habilidad.
Ideal para regalar: ¡Estos racimos de maní y caramelo son excelentes regalos caseros!
Consejos para servir
Sirva los racimos de maní y caramelo con una taza de café o chocolate caliente para disfrutar de un placer acogedor. -
Colóquelos en una bandeja de postre junto con galletas y frutas para un festín festivo.
Desmenuza los racimos sobre helado de vainilla para obtener un postre más indulgente.
Empaquételos en bolsas o cajas decorativas como regalos caseros para días festivos, cumpleaños u ocasiones especiales. Conclusión
Los racimos de caramelo y maní son una delicia deliciosa que combina el satisfactorio crujido del maní tostado con la delicada dulzura del caramelo y el chocolate. Estos bocadillos del tamaño de un bocado son perfectos para compartir o disfrutar cuando se te antoje algo dulce y crujiente. Su fácil preparación y versatilidad los convierten en una gran opción para fiestas, regalos o un postre especial en casa. Ya sea que los sirva con café o los disfrute como refrigerio al mediodía, ¡estos racimos seguramente satisfarán su gusto por lo dulce!