Evita el error que te puede envejecer
¿La clásica trampa después de los 60? Optar por un color demasiado oscuro, pensando que lucirá más joven. En realidad, como nos recuerda el experto:
“Cuanto más oscuro te vuelves, más se endurecen tus rasgos”.
Por lo tanto, los tonos marrones muy oscuros o los negros intensos deben manipularse con precaución, a menos que su temperamento se preste naturalmente a ellos.
Un color de cabello que te refleje
Por último, no olvides que tu color ideal también debe reflejar tu personalidad. Thomas Tuccinardi insiste:
“El diagnóstico del color no debe limitarse al tono de piel, sino que debe adaptarse al estado de ánimo y al temperamento de cada mujer”.
En resumen, tu color de cabello debe ser tan vibrante como tú. Un tono brillante para las más dinámicas, un tono suave y natural para las más discretas, ¡y un color vibrante para quienes buscan reafirmar su personalidad!
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