Paso 1: Prepara los garbanzos
Remoja los garbanzos: La noche anterior a la preparación, pon los garbanzos en remojo en abundante agua. Esto ayudará a que se cocinen más rápido y sean más fáciles de digerir. Escúrrelos y enjuágalos antes de añadirlos al guiso.
Paso 2: Prepara los ingredientes
Pica las verduras: Mientras los garbanzos se remojan, pela y corta las patatas en trozos pequeños. Pica el ajo y reserva. Si utilizas cebollas pequeñas, déjalas enteras; si utilizas cebollas grandes, pícalas finamente.
Paso 3: Dorar la carne
Calienta la mantequilla: En una olla grande o en una olla holandesa, calienta los 20 g de mantequilla a fuego medio-alto.
Dorar la carne: Añade la carne picada a la olla, sazonándola con sal. Dorar la carne hasta que esté dorada por todos lados. Esto debería llevar unos 5-7 minutos.
Paso 4: Añade los aromáticos
Añade las cebollas y el ajo: Añade las cebollas a la olla y saltea hasta que se vuelvan traslúcidas. Luego, agrega el ajo picado y cocina por otro minuto hasta que esté fragante.
Incorpora el chile: si te gusta un poco picante, corta el chile fresco (quita las semillas si lo deseas) y agrégalo a la olla. Ajusta la cantidad según tu tolerancia al picante.
Paso 5: agrega la pasta de tomate y
la mezcla líquida en la pasta de tomate: agrega la pasta de tomate, dejándola cocinar durante 2-3 minutos para realzar su sabor.
Agrega agua: vierte 800 ml de agua y lleva la mezcla a ebullición.
Paso 6: agrega garbanzos y papas
Combina los ingredientes: agrega los garbanzos remojados y escurridos y las papas cortadas en cubitos a la olla. Revuelve bien para combinar todos los ingredientes.
Sazona: agrega 1.5 cucharaditas adicionales de sal, ajustando al gusto. También puedes agregar pimienta en este punto.
Paso 7: cocina a fuego lento el guiso
Tapa y cocina: baja el fuego a fuego lento, tapa la olla y deja cocinar durante 1.5 a 2 horas, o hasta que la carne y los garbanzos estén tiernos. Revisa de vez en cuando, revolviendo y añadiendo más agua si es necesario.
Paso 8: Toques finales
Revisa la consistencia: Si el guiso está demasiado espeso, añade un poco más de agua. Prueba y ajusta la sazón según sea necesario.
Decora y sirve: Una vez listo, sirve el guiso en tazones y decora con hierbas frescas como cilantro o perejil.
Información nutricional (por porción, en base a 6 porciones)
Calorías: 380 kcal
Proteínas: 28 g
Grasas: 12 g
Carbohidratos: 36 g
Fibra: 9 g
Sodio: 600 mg
Azúcar: 3 g
Preguntas frecuentes (FAQ)
1. ¿Puedo usar garbanzos enlatados en lugar de secos?
Sí, puedes usar garbanzos enlatados para mayor comodidad. Si usas enlatados, agrégalos durante los últimos 30 minutos de cocción ya que ya están cocidos.
2. ¿Qué pasa si no tengo carne de res?
Puedes sustituir la carne de res por cordero, pollo o incluso una opción vegetariana como champiñones o tempeh para un guiso a base de plantas.
3. ¿Cómo guardo las sobras?
Guarda las sobras en un recipiente hermético en el refrigerador hasta por 3 días. Vuelve a calentar en la estufa o en el microondas antes de servir.
4. ¿Puedo congelar este guiso?
¡Sí! Deja que el guiso se enfríe por completo, luego transfiérelo a recipientes aptos para el congelador. Se puede congelar hasta por 3 meses. Descongela durante la noche en el refrigerador antes de recalentarlo.
Consejos para hacer el guiso de carne y garbanzos perfecto
Elige carne de calidad: busca carne de res bien marmolada para un guiso tierno. El asado de chuck o la pechuga son excelentes opciones.
No apresures la cocción: cuanto más cocines a fuego lento el guiso, más se desarrollarán los sabores, ¡así que tómate tu tiempo!
Ajusta para picar: si prefieres un sabor más suave, omite el chile o usa pimientos morrones en su lugar.
Hazlo a tu gusto: siéntete libre de agregar otras verduras como zanahorias, apio o pimientos morrones para mayor nutrición y sabor.
Consejos de almacenamiento
Refrigeración: mantenga el guiso en un recipiente hermético en el refrigerador durante 3 o 4 días. A menudo, sabe aún mejor al día siguiente, ya que los sabores se fusionan.
Congelación: este guiso se congela excepcionalmente bien. Divídalo en porciones del tamaño de una comida y congélelo para comidas rápidas más tarde.
Recalentamiento: recaliente suavemente en la estufa, agregando un poco de agua si es necesario para mantener la consistencia deseada.
Conclusión
Este abundante guiso de carne y garbanzos es más que una comida; es una experiencia culinaria deliciosa que calienta tanto el cuerpo como el alma. Con sus sabores robustos e ingredientes sustanciosos, es perfecto para cenas o reuniones familiares. Además, es adaptable, lo que le permite incorporar verduras de temporada o lo que tenga a mano. Disfrute de este guiso con sus seres queridos y saboree la reconfortante bondad casera.