Patatas nuevas : Su piel fina y su alto contenido de humedad pueden hacer que se cocinen al vapor en lugar de freírse.
Exceso de humedad : las patatas sin secar a menudo se pegan a la sartén, se vuelven blandas y pueden quemarse parcialmente.
Abarrotar la sartén : demasiadas patatas impiden que se cocinen de manera uniforme y hacen que se evaporen.
Revolver demasiado evita que las patatas se doren correctamente y puede convertirlas en papilla.
Empezar a freír en una sartén fría con aceite frío : dificulta la rápida formación de una costra y provoca que se pegue.
Cantidad incorrecta de aceite : Demasiado o muy poco aceite puede afectar la calidad de tus patatas fritas.
Ahora ya sabes cómo evitar los principales errores a la hora de freír patatas y conseguir unos resultados perfectos.