- Para comenzar, vamos a realizar el fermento, lo que permitirá que la masa leude con mayor facilidad. En un recipiente, vamos a colocar la levadura desmenuzada.
Agregaremos 2 cucharadas de azúcar, 2 cucharadas de harina e incorporamos el agua. Mezclamos bien hasta desintegrar. Dejamos reposar por unos 20 minutos. - Por otro lado, pondremos la harina en un recipiente y ahucaremos en el centro. Debemos recordar siempre guardar un poco de la harina asignada, por si la necesitamos luego para terminar de elaborar la masa.
- En ese hueco pondremos el azúcar, el fermento, los huevos, un chorrito de vino oporto y mezclaremos. Agregaremos también la cebolla, los dientes de ajo picaditos y los condimentos.
- Por último agregaremos la manteca, debemos integrar muy bien todos los ingredientes. Cuando vemos que ya comienza a formarse el bollo, volcamos sobre la mesada y comenzamos a amasar enérgicamente.
- Una vez que se forma una masa suave y homogénea, la ponemos en el recipiente y la taparemos. Dejaremos descansar en un recipiente grande, hasta que duplique su volumen.
- Cuando la masa ha crecido, será la hora de amasarla nuevamente, la estiramos con un palo de amasar y agregaremos los fiambres cortados en cubos. Los fiambres pueden variar, podemos agregar también longaniza, mortadela, aceitunas, pasas y lo que se te ocurra.
- Terminamos de amasar muy bien hasta integrar los fiambres y dejamos descansar tapada nuevamente.
- Cuando ha crecido, nuevamente vamos a amasar y separaremos la masa en 4 bollos de partes iguales. Los pondremos en moldes de 1/2 kilo, los ubicaremos en una placa para horno y dejaremos descansar por última vez.
- Cuando vemos que han levado, los pincelamos con huevo y llevamos a horno precalentado en unos 160°c, debe estar bajo para que se cocine tranquilo.
- El tiempo de cocción dependerá del tamaño que los has hecho, para estos que son de 1/2 kilo, los dejaremos aproximadamente por 40 a 45 minutos. De todas formas te aconsejo que te cerciores si ya se ha cocido en el centro, con la ayuda de un palillo.
- Cuando los retiramos del horno, pondremos sobre él hebras de queso o queso cremoso, esto imitará el glaseado tradicional.
Y esto es todo para este delicioso pan dulce salado con jamón y queso receta ideal para estas fiestas o para ¡cuando gustes!
Consejos
- Es importantísimo hacer el fermento previo, como te enseñamos el el primer paso. La levadura necesita reaccionar para leudar, así que no subestimes este paso.
- Este pan dulce lo hemos hecho de jamón, queso y salame, pero en realidad podemos utilizar cualquier tipo de fiambre. Si queremos podemos agregarle aceitunas o pasas de uvas, le quedarán muy bien.
- Fundamental que el horno este precalentado, para conseguir una cocción pareja.