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- Separa las claras de las yemas y reserva ambas.
- En un tazón grande, mezcle las yemas de huevo y el azúcar granulada
hasta que la mezcla adquiera un color pálido y esponjoso.
- Agrega el jugo de limón fresco y la ralladura de limón y mezcla todo hasta que esté bien mezclado.
- En otro recipiente bate las claras hasta que estén firmes y formen picos.
- Añade suavemente las claras batidas a la
mezcla de yemas, incorporándolas suavemente con una espátula hasta que la mezcla esté suave.
- Luego agregue la crema batida, doblando suavente la mezcla hasta que quede suave y cremosa.
- Divide el mousse de limón en tazas individuales o
en un plato grande y déjalo reposar en el refrigerador por al menos 2 horas, o hasta que esté firme.
- Al momento de servir, puedes agregar una hoja de menta para decorar cada recipiente.
- También puedes añadir un poco más de nata montada
y ralladura de limón para obtener un resultado aún más indulgente.
- ¡Buen provecho!
