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- Vierte la nata en una cacerola y caliéntala a fuego medio, revolviendo frecuentemente, hasta que hierva (85 grados centígrados).
- Agrega el jugo de limón y continúa revolviendo hasta que la crema espese.
- En un colador de malla fina colocado sobre un bol, coloque la estopilla ligeramente húmeda en 4 capas.
- Vierte la nata espesa en el colador forrado con una gasa y déjala a temperatura ambiente hasta que se enfríe por completo. ¡No presiones ni exprimas la crema!
- Una vez que la crema haya alcanzado la temperatura ambiente, tapa el colador con film transparente y refrigera de 10 a 12 horas.
- El mascarpone casero se puede guardar en el frigorífico y utilizar en una semana.
- ¡Ya puedes hacer tiramisú con mascarpone casero y multitud de otros postres deliciosos!