MÉTODO
- En un bol con la harina, añade la levadura y el azúcar y bate. Agrega la leche, el aceite, la esencia de vainilla, la miel, el huevo, la sal y la ralladura de naranja y mezcla todo bien.
- Mezclar hasta que se forme la masa. Trabajar la masa hasta que quede tersa, suave y elástica. Cubrir el bol con film transparente y dejar reposar durante 1 hora, o hasta que duplique su volumen.
- Una vez pasado el tiempo, divide la masa en 12 trozos (unos 80 gramos) y forma una bola con cada trozo. Coloca las bolas en una bandeja para horno forrada con papel de horno, dejando espacio entre ellas para que suban. Cubrir con una toalla y dejar reposar hasta que duplique su volumen, aproximadamente 1 hora.
- Una vez que los rollitos hayan duplicado su volumen, untarlos con el huevo y la leche. Transfiera al horno y cocine a 180°C por 15 minutos. Dejar enfriar por completo.
- En un bol, mezcle la nata, el extracto de vainilla y el azúcar glass. Batir hasta que se formen picos rígidos. Transfiera a una manga pastelera.
- Corta cada sándwich por encima, sin cortar la base. Rellena cada sándwich con nata y nivelalo con un cuchillo.
- Transfiera a un plato para servir, decore con azúcar glas y sirva.