Para empezar preparamos todos los ingredientes para que nos sea más fácil ponernos manos a la obra. Separar las claras de las yemas. Colocar las claras en un bol con una pizca de sal. Batir la espuma y luego añadir poco a poco el azúcar. Mezclar las yemas de huevo con aceite y agua.



Después de que las claras se vuelvan como un merengue, agrega las yemas. Mezcla suavemente de abajo hacia arriba con movimientos amplios. Mezclar la harina con el cacao y la levadura en polvo y tamizar.



Agregue harina a la mezcla de proteína y yema. Mezcla suavemente para que las proteínas no se deshagan y queden una superficie esponjosa.



Repartimos la composición en una bandeja de horno 38/25, que cubrimos con papel de horno. Colocar en horno precalentado a 180 grados durante 25-30 minutos o hasta que pase la prueba del palillo. Dejar enfriar la parte superior. Utilicé una bandeja extraíble.



Para la nata colocar la nata espesa en una sartén. Dejar que se caliente bien, pero no que hierva.
Partir el chocolate en trozos, poner en un bol y añadir la nata caliente. Dejar actuar 1 minuto y luego revolver. Déjalo enfriar, mételo en el congelador durante una hora o en el frigorífico durante 3-4 horas. Retirar, mezclar hasta obtener una crema suelta. Puedes añadir 1 esencia de ron.


Para el almíbar caramelizar el azúcar, añadir agua y un sobre de capuchino que disolví en 2 cucharaditas de agua tibia. Deja que hierva un poco, reserva y añade la esencia de ron.
Para el glaseado colocar todos los ingredientes en un cazo y poner a fuego lento. Remueve constantemente hasta que el chocolate se derrita. Para obtener un glaseado brillante, lo cuelo a través de un colador muy fino.
Recopilación:
La parte superior bien enfriada se corta en 2 partes. Usé una bandeja para hornear para armar el pastel, sobre la cual también horneé la parte superior. Puse la primera tapa, le hice un almíbar muy bien y le agregué nata. Reservé 4 cucharadas de nata para decorar. Ponemos la segunda tapa y muy bien almíbar. Mete el bizcocho en el frigorífico durante 3-4 horas o incluso toda la noche.
Cortar el pastel:Me salieron 24 piezas. Dejamos espacio entre ellas para el glaseado. Coge el glaseado con una cucharadita y extiéndelo sobre cada trozo. Derretí 150 g de chocolate negro al baño maría. Lo metí en una bolsa, corté un poco la esquina y le hice unas líneas con trazos rápidos.

Estas son buenas galletas.



A mi esposo y a mis amigos les encanta este pastel. Vale la pena intentarlo.


