Seguramente te ha pasado, quizás mientras limpiabas la casa, lavabas la ropa o simplemente por error, que se te caían unas gotitas de lejía sobre la ropa y se creaban las clásicas manchas decoloradas.
La lejía puede arruinar permanentemente tu ropa, pero antes de tirarla, hay algunos trucos que puedes probar para salvarla y deshacerte de las manchas de lejía.
Continúa en la siguiente página