Primero separa los huevos y coloca las yemas y las claras en dos boles diferentes. Primero, mete las claras en el congelador durante 15 minutos para obtener un mejor resultado después.
Batir las yemas hasta que estén espumosas. Mezclar la harina y la levadura y tamizarlas con la yema, añadir la leche e incorporar. Sacar las claras del congelador y batirlas a punto de nieve con unas varillas eléctricas, verter el azúcar poco a poco. Muy importante en lo que respecta a las claras: el bol y los palillos deben estar absolutamente libres de grasa para obtener un buen resultado.
Agrega la clara batida a la mezcla de huevo y harina e incorpórala a mano, ¡sin mezclar demasiado! Nota al cocinar: agregue aceite a la sartén y extiéndalo en la sartén con una brocha de repostería y elimine cualquier exceso visible con un paño de cocina. Utilice una llama media. Utilice un cucharón para verter la mezcla en la sartén. En una sartén normal caben bien dos panqueques.
Tan pronto como el panqueque haya subido, agregue un segundo cucharón de relleno, luego agregue un poco de agua en una esquina no utilizada de la sartén y tape. Después de unos minutos, voltea el panqueque. ¡Disfrute de su comida!