2. Cataplasma para las articulaciones cansadas
Triture unas cuantas hojas hasta formar una pasta suave y aplíquela sobre las articulaciones doloridas durante quince minutos antes de enjuagar. Perfecta después de la jardinería o una larga caminata. 3. Inhalación de vapor para respirar con facilidad
Hierve un poco de agua, añade tres o cuatro hojas e inhala el vapor con cuidado durante cinco minutos. Este sencillo truco puede ayudar a despejar las vías respiratorias.
4. Una hoja para masticar y aliviar la garganta
Mastica un trocito de hoja (de unos dos centímetros) y escupe la pulpa. El jugo forma una fina capa calmante sobre la garganta, un alivio suave para la irritación leve.
5. Un impulso verde para tu espíritu
Coloca una maceta de Kalanchoe cerca de tu sillón. Toca sus hojas a diario. Estudios sugieren que este pequeño gesto consciente puede ayudar a reducir el estrés, y es simplemente un placer contemplarlo.
Una planta arraigada en la tradición y la bondad
En las regiones tropicales, estos pequeños remedios forman parte de la vida cotidiana. Por ejemplo, Jacques, un jardinero jubilado de 65 años, una vez preparó té de hoja de la vida durante un invierno seco para calmar la tos. “Me ayudó”, dice, “y sobre todo, me relajó”.
Úsalo con prudencia
Como con cualquier planta natural, usa el sentido común. Consulta con un profesional de la salud antes de probarla, especialmente si tomas medicamentos o tienes problemas de salud. Estos consejos complementan, no reemplazan, el tratamiento médico.