Mejora tu sistema inmunológico.
Te protege de los resfriados.
Proporciona un increíble impulso de energía.
Ayuda a tu digestión y controla tu metabolismo.
Elimina muchas toxinas.
Equilibra los niveles de pH de tu cuerpo.
Mejora la apariencia de tu piel.
Mejora tu respiración.
Ayuda en la pérdida de peso.
Mejora tu estado de ánimo y felicidad, evitando ansiedades.
Hidrata tu sistema linfático.
Promueve la curación.
Precaución: Se recomienda encarecidamente no consumir limón si se sufre de ardores o úlceras de estómago, reflujo gastroesofágico, trastornos renales y/o de la vesícula biliar, o se es alérgico a este cítrico.