Servicio:
Una vez que el helado de sandía haya alcanzado la consistencia deseada, sírvelo decorándolo con rodajas de sandía fresca u hojas de menta, si lo deseas.
Nota:
Asegúrate de que la tarrina y los utensilios de helado estén bien fríos antes de comenzar para facilitar el proceso de congelación.
Puedes guardar el helado de sandía en el congelador durante varias semanas, aunque es mejor consumirlo a los pocos días para conservar su frescura y sabor.
Esta receta de helado de sandía es perfecta para disfrutar de un postre fresco y saludable durante los calurosos días de verano. Es ligero, cremoso y lleno de sabor afrutado. ¡Disfrute de su comida!