El eugenol también aporta al clavo sus propiedades analgésicas y antiinflamatorias. Puedes utilizarlo como remedio para dolores de cabeza, dolores digestivos y dolores articulares. Además de consumirlos, puedes utilizar el clavo a modo de cataplasma. Simplemente mezcle unas gotas de aceite esencial de clavo con agua y arcilla y aplíquelo en el área dolorida.
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6. Cuida tus huesos y articulaciones
Según un estudio publicado en Natural product research, el clavo contiene ciertos elementos como flavonoides, manganeso y eugenol que favorecen la salud de los huesos y las articulaciones. Estas sustancias aumentan la densidad ósea, ayudan a crear tejido óseo y transportan minerales saludables a los huesos.
7. Combatir las bacterias
Se ha demostrado que los clavos tienen propiedades antimicrobianas, lo que significa que pueden ayudar a detener el crecimiento de microorganismos como las bacterias.
