¡Hago esto casi todos los días desde que aprendí esta receta de un cocinero experimentado!

  1. Preparación de la masa:

    • En un bol grande, mezcla la harina de trigo y la sal.
    • Forma un hueco en el centro de la mezcla de harina y añade el huevo y el agua. Mezcla bien hasta obtener una masa homogénea.
    • Añade la manteca a temperatura ambiente y amasa durante unos 10-15 minutos, hasta que la masa esté suave y elástica. Si la masa está muy pegajosa, puedes añadir un poco más de harina, pero ten cuidado de no agregar demasiada.
  2. Reposo de la masa:

    • Forma una bola con la masa y colócala en un bol ligeramente enharinado. Cubre con un paño húmedo y deja reposar en un lugar cálido durante aproximadamente 1 hora, o hasta que la masa haya duplicado su tamaño.
  3. Formado del pan:

    • Precalienta el horno a 200°C (392°F).
    • Una vez que la masa haya levado, desgasifícala ligeramente amasándola suavemente.
    • Divide la masa en porciones iguales (dependiendo del tamaño que desees para tus panes rellenos).
    • Toma cada porción y aplánala ligeramente. Coloca un poco de mozzarella en el centro y envuelve la masa alrededor del queso, asegurándote de sellar bien los bordes para que el queso no se escape durante la cocción.
    • Coloca los panes rellenos en una bandeja para horno forrada con papel pergamino.
  4. Pincelado y horneado:

    • Bate la yema de huevo y utiliza un pincel de cocina para pincelar la superficie de cada pan relleno. Esto ayudará a que se doren y obtengan un hermoso color dorado.
    • Hornea en el horno precalentado durante unos 25-30 minutos, o hasta que los panes estén dorados y crujientes.
    • Retira los panes del horno y déjalos enfriar sobre una rejilla.
    • ¡Sirve caliente para disfrutar del queso mozzarella derretido y el delicioso pan crujiente!

Leave a Comment