- Preparación de la masa
- En un bol grande, tamiza la harina y añade la mantequilla fría en cubos.
- Trabaja la mantequilla y la harina con las yemas de los dedos hasta obtener una mezcla arenosa.
- Agrega el azúcar glas, la yema de huevo, una pizca de sal y el extracto de vainilla (si lo usas).
- Amasar rápidamente hasta formar una masa tersa y homogénea.
- Envolver la masa en film transparente y dejar reposar en el frigorífico durante al menos 30 minutos.
- dar forma a las galletas
- Precalienta el horno a 180°C (estático).
- Extienda la masa sobre una superficie ligeramente enharinada hasta que tenga unos 5 mm de espesor.
- Utilice cortadores de galletas para cortar las formas deseadas.
- Coloca las galletas en una bandeja de horno forrada con papel de horno dejando un poco de espacio entre cada una.
- Cocinando
- Hornea las galletas en el horno precalentado durante unos 10-12 minutos, o hasta que los bordes estén ligeramente dorados.
- Retirar del horno y dejar enfriar completamente en la bandeja antes de moverlos, ya que todavía estarán muy desmenuzables nada más sacarlos.
- Decoración (opcional)
- Una vez enfriadas, espolvorea las galletas con azúcar glas para darle un toque aún más delicioso.
Consejos para unas galletas de mantequilla perfectas
- Utilice mantequilla de alta calidad: ¡es el ingrediente principal y marcará la diferencia!
- Trabajar la masa rápidamente para evitar calentarla demasiado.
- Para darle un toque diferente, puede agregar ralladura de limón o naranja para darle un sabor cítrico.
¡Diviértete y disfruta de tu comida! 🍪