Las incrustaciones de cal son un auténtico flagelo para el fregadero, el lavavajillas y la ducha . Estos son precisamente aquellos ambientes en contacto permanente con el agua. Para eliminar y blanquear nuestros accesorios de baño podemos recurrir al uso de dos ingredientes naturales que, si se conocen, pueden hacer que todo brille. Se trata de nuestro querido bicarbonato de sodio y vinagre de vino blanco . Dos productos naturales que cuestan muy poco en el supermercado. El bicarbonato de sodio tiene una fuerte acción blanqueadora e higienizante, el vinagre desinfecta y abrillanta todas las superficies, eliminando también los malos olores.
En cuanto al lavavajillas, puedes sustituir el detergente por dos cucharadas de bicarbonato de sodio y, si realmente quieres, una sola gota de detergente lavavajillas. En su lugar, puedes utilizar vinagre de vino como abrillantador, tus platos quedarán brillantes e inodoros. Incluso el propio lavavajillas quedará más limpio y fragante, especialmente si recuerdas lavarlo en vacío una vez al mes colocando un recipiente con vinagre en su interior.
La cal de las superficies del baño o la cocina, por otro lado, se puede eliminar creando una mezcla de vinagre y bicarbonato de sodio. Agrega dos cucharadas de bicarbonato de sodio a dos cucharadas grandes de vinagre. Dependiendo del tamaño de la superficie a limpiar podrás decidir duplicar, triplicar o reducir a la mitad las dosis que te indicamos. Frotando suavemente las superficies con estos dos ingredientes notarás como todo se desprenderá con mucha facilidad. Después del enjuague, tu fregadero brillará como nunca, lucirá como nuevo .
Este procedimiento es válido para todas las superficies afectadas por la cal y no solo: también es eficaz para eliminar el óxido. Después de probar esta nueva solución, estamos seguros de que nunca volverás atrás. Notarás rápidamente los beneficios económicos y resultados óptimos. ¡No olvides tampoco que estarás haciendo un gran regalo al medio ambiente!
