Consejos adicionales:
- Separar Claras y Yemas: Asegúrate de que las claras estén completamente libres de yema. Cualquier rastro de yema puede dificultar el batido adecuado. Separa las claras de las yemas con cuidado para evitar cualquier contaminación.
- Batir Correctamente: No batas demasiado las claras. Si las claras se baten en exceso, el merengue puede volverse quebradizo y perder su textura ligera y esponjosa. Deja de batir cuando las claras alcancen picos rígidos y brillantes.
¡Y listo! Ahora tienes un delicioso postre casero listo para disfrutar.