En un recipiente pondremos 2 huevos, 3 cucharadas de azúcar y una cucharadita de esencia de vainilla y con la ayuda de un batidor lo mezclamos muy bien.
Luego añadimos 100 ml de leche y 2 cucharadas de aceite, 120 g de harina de trigo, una cucharadita de polvo para hornear y media cucharadita de canela y continuamos mezclando.
Cuando no hayan grumos de harina, está lista la mezcla.
Comenzamos quitándoles la parte centra a las manzanas, luego las pelamos y después las laminamos o cortamos finamente.
Junto a las 5 manzanas laminas añadimos la mezcla anterior y lo integramos todo bien con cuidado de no partir las manzanas.
Luego la pondremos en un molde desmontable de 20cm de diámetro previamente preparado con papel de hornear.
Primero añadimos la mitad de la mezcla, la emparejamos con la ayuda de una espátula y luego añadimos la otra mitad y emparejamos.
Lo introducimos en un horno precalentado a 180°C durante 70 minutos o cuando veamos que ya está lista.
Retiramos del horno, dejamos que se enfrie y luego la desmoldamos.
La transferimos a un plato y la decoramos con un poco de mermelada.
Recomendaciones
Para lograr capas uniformes y que las manzanas se cocinen de manera uniforme, corta las manzanas en rodajas finas, preferiblemente con una mandolina para mayor precisión.
Deja reposar la tarta durante al menos 30 minutos después de sacarla del horno. Esto permitirá que los jugos se asienten y la tarta se mantenga jugosa pero no líquida al cortarla.
