El potos es una planta perfecta para embellecer nuestros hogares, requiere muy pocos cuidados y puede vivir mucho tiempo . Ofrece hojas acorazonadas, de color verde intenso, sobre tallos largos que, si son abundantes, se disponen en “cascada”. Cuando las hojas de tus potos empiezan a ponerse amarillas , significa que la planta está sufriendo.
Las hojas amarillas definitivamente no son una buena señal para tu planta, pero esto no significa necesariamente que la planta haya llegado al final de su ciclo de vida o que esté sufriendo una enfermedad grave. Una de las principales causas del color amarillento de las hojas de potos es la exposición excesiva al sol.
Pothos prefiere cantidades moderadas de luz e incluso puede crecer y prosperar con muy poca luz. No tolera la luz solar directa y las hojas amarillas del potos pueden ser una indicación de que su planta está recibiendo demasiado sol.
Si tu planta está cerca de una ventana orientada al sur, muévela o aléjala de la luz. Alternativamente, puedes solucionar el problema de las hojas amarillas colocando una cortina transparente entre la planta y la ventana.
Demasiado o muy poco fertilizante también puede provocar que las hojas de potos se pongan amarillentas. Una alimentación mensual con un abono soluble específico es más que suficiente.
Otras causas del amarillamiento de las hojas de potos podrían ser la presencia de enfermedades fúngicas, raíces podridas o manchas bacterianas en las hojas. Las raíces pueden pudrirse debido a la presencia de hongos en suelos demasiado húmedos o mal drenados.
Si tu potos comienza a mostrar síntomas de raíces podridas, asegúrate de drenar bien la tierra y limitar la cantidad de agua. No rocíes agua directamente sobre las hojas porque los hongos prosperan en condiciones de humedad.
Desinfecta las tijeras y corta las hojas amarillentas, desinfectando el tallo después de cada corte. Si la enfermedad se ha extendido a las raíces, es posible que la planta ya no pueda recuperarse.