- Preparación de las cebollas de verdeo Retirá las hojas amarillas y podridas de las cebollas de verdeo. Esta parte no se conservará bien y puede afectar al resto.
- Método del jarrón
- Prepará un jarrón o cualquier botella o lata limpia.
- Agregá una pequeña cantidad de azúcar blanca en el fondo del jarrón.
- Colocá las cebollas de verdeo verticalmente en el jarrón, como si fueran un ramo de flores, y llená el jarrón con agua hasta cubrir solo las raíces.
- Colocá el jarrón en un lugar soleado pero no expuesto directamente al sol.
- Cambiá el agua cada 3-4 días para mantener las cebollas frescas y evitar que se marchiten.
- Método del film plástico
- Lavá las cebollas de verdeo y remojalas en una solución de bicarbonato de sodio y agua durante 5 minutos para eliminar cualquier residuo.
- Enjuagalas y secá bien las cebollas con toallas de papel.
- Dividí las cebollas en porciones pequeñas y envolvelas bien con film plástico.
- Guardalas en el refrigerador, donde se conservarán frescas por hasta un año.
- Método de congelación
- Lavá y secá bien las cebollas de verdeo.
- Cortá las cebollas en rodajas finas o picadas, según tu preferencia.
- Colocá las cebollas cortadas en una bolsa de conservación fresca y sellala bien.
- Guardá la bolsa en el congelador. Las cebollas congeladas se mantendrán frescas por mucho tiempo y estarán listas para usarse en cualquier momento.
- Es importante no descongelar las cebollas antes de usarlas, para evitar que se vuelvan blandas y oscuras.
Con estos métodos, podrás almacenar las cebollas de verdeo de manera efectiva y mantenerlas frescas durante mucho tiempo.
Probá estos trucos y disfrutá de cebollas de verdeo frescas siempre que las necesites.