Cazuela De Salchichas Y Patatas Fritas Cremosas
- Preparar las patatas: En una sartén grande, calienta el aceite de oliva y añade las rodajas de patata. Fríelas a fuego medio-alto hasta que estén doradas y crujientes. No es necesario cocinarlas completamente en este paso, solo dorarlas un poco. Saca las patatas y ponlas sobre un papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
- Cocinar las salchichas: En la misma sartén, añade un poco más de aceite si es necesario y cocina las salchichas hasta que estén doradas y bien cocidas. Sácalas de la sartén y córtalas en rodajas.
- Sofreír la cebolla y el ajo: En la misma sartén, agrega la mantequilla y, cuando se derrita, añade la cebolla picada. Cocina a fuego medio hasta que esté tierna y transparente, unos 5 minutos. Luego, agrega el ajo y cocina un par de minutos más.
- Hacer la salsa cremosa: Añade el caldo de pollo y la nata líquida a la sartén. Remueve bien para mezclar. Deja que hierva a fuego lento durante unos 5 minutos hasta que la salsa se espese ligeramente. Si deseas, agrega pimentón y salpica con sal y pimienta al gusto.
- Montar la cazuela: En una cazuela o fuente de horno, coloca una capa de las patatas fritas en el fondo. Luego, distribuye las rodajas de salchichas y encima la mezcla de cebolla, ajo y salsa cremosa. Repite el proceso hasta terminar con las patatas y las salchichas.
- Hornear: Precalienta el horno a 180°C (350°F). Espolvorea el queso rallado por encima de la cazuela y hornea durante unos 15-20 minutos o hasta que el queso se derrita y se dore ligeramente.
- Servir: Saca la cazuela del horno y decora con un poco de perejil fresco si lo deseas. Sirve caliente y disfruta de este delicioso plato reconfortante.
Este plato es ideal para una comida familiar o un día en el que quieras algo sabroso y fácil de preparar. ¡Seguro que será un éxito!
