Cazuela cremosa de gambas y espinacas

Paso 1: Prepara los camarones y las espinacas
Precalienta el horno a 190°C (375°F). Mientras se precalienta el horno, prepara los camarones y las espinacas. Calienta 2 cucharadas de aceite de oliva o mantequilla en una sartén grande a fuego medio. Agrega el ajo picado y sofríe durante 1-2 minutos hasta que esté fragante.

Agregue los camarones a la sartén, sazone con sal y pimienta y cocine hasta que estén rosados ​​y casi cocidos, aproximadamente de 3 a 4 minutos. Tenga cuidado de no cocinar demasiado los langostinos ya que seguirán cocinándose en el horno. Una vez listas, retira las gambas de la sartén y resérvalas.

En la misma sartén agrega las espinacas picadas. Cocine durante 2-3 minutos, revolviendo ocasionalmente, hasta que las espinacas se ablanden. Retirar del fuego y reservar.

Paso 2: Haz la salsa de crema
Vierte la crema en una cacerola mediana y deja hervir a fuego medio. Agrega poco a poco la mozzarella en rodajas, revolviendo constantemente hasta que se derrita y la salsa quede suave. Luego agregue el parmesano rallado y mezcle hasta que esté completamente combinado.

Sazone la salsa con sal y pimienta al gusto. El resultado debería ser una salsa rica y cremosa que cubra maravillosamente los camarones y las espinacas.

Paso 3: Ensamble la cazuela
En un tazón grande, combine los camarones cocidos, las espinacas marchitas y la salsa cremosa. Mezcle suavemente para cubrir los camarones y las espinacas uniformemente con la salsa.

Transfiera la mezcla a una fuente para hornear engrasada de 9×13 pulgadas, distribuyéndola uniformemente. Si lo deseas, puedes espolvorear un poco de parmesano encima para que se dore más.

Paso 4: hornea la cazuela
Coloca la sartén en el horno precalentado y hornea durante 20 a 25 minutos o hasta que la parte superior esté dorada y la salsa comience a burbujear por los bordes. Esto permitirá que los sabores se mezclen y el queso formará una corteza deliciosa encima.

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Paso 5: Decorar y servir
Una vez cocida, retiramos la cazuela del horno y dejamos enfriar unos minutos. Adorne con perejil fresco picado para darle más color y frescura. Sirva el flan bien caliente, solo o con picatostes o una simple ensalada.

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