¡Cada vez que preparo esto, la gente siempre me pide la receta!
Precalienta el horno a 190 °C (375 °F).
En un plato hondo, combina el pan rallado, el perejil, el tomillo, el romero, la sal y la pimienta.
Sumerge cada chuleta de cerdo en los huevos batidos y luego presiónalas en la mezcla de pan rallado para cubrirlas de manera uniforme. Reserva.
En una sartén grande, derrite la mantequilla a fuego medio. Incorpora la harina y cocina durante aproximadamente 1 minuto hasta que se forme una pasta. Incorpora la leche poco a poco hasta que quede suave.
Agrega el ajo y la nuez moscada y cocina hasta que la salsa espese, aproximadamente 5 minutos. Sazona con sal y pimienta a gusto.
Coloca la mitad de las papas en rodajas en una fuente para horno engrasada. Vierte la mitad de la salsa sobre las papas y luego espolvorea con la mitad de los quesos cheddar y parmesano.
Repite con las papas restantes, la salsa y los quesos.
Cubre la fuente con papel de aluminio y hornea durante 30 minutos. Luego, retira el papel de aluminio, coloca las chuletas de cerdo empanizadas sobre las papas y hornea sin tapar durante 25 a 30 minutos más, o hasta que el cerdo esté bien cocido y las papas estén tiernas y doradas.
Deja reposar el plato durante unos minutos antes de servir para permitir que los sabores se fusionen.
Variaciones y consejos
Para darle un toque diferente, puedes usar batatas en lugar de papas rojizas, lo que le dará un dulzor único al plato. Si lo prefieres, puedes sustituir el cheddar y el parmesano por gruyere o una mezcla de tus quesos favoritos. Agregar un poco de pimentón a la mezcla de pan rallado puede brindar un agradable sabor ahumado a las chuletas de cerdo. Para darle un toque picante, una pizca de pimienta de cayena en la salsa puede darle el toque perfecto.