En un tazón, mezcle la harina, los huevos y la leche.
Pelar las manzanas, quitarles el corazón y cortarlas en rodajas gruesas (4 rodajas por manzana).
Calienta la mantequilla en una sartén.
Sumerge las rodajas de manzana en la masa y colócalas en la sartén caliente.
Dejar dorar unos minutos por cada lado. Colocar sobre papel absorbente durante unos minutos y luego colocar en un plato cubriendo con azúcar glas.
Servir caliente.