Bate los huevos, con varillas manuales, en un cuenco con el azúcar hasta que dupliquen su volumen.
2. Tamiza la harina
Añade poco a poco la harina, con ayuda de un tamiz, sin dejar de batir hasta que se incorpore totalmente.
3. Pincela el molde
Forra la placa del horno con una hoja de papel sulfurizado y pincélalo con un poco de mantequilla. Reparte la masa preparada sobre el papel y extiéndela de manera que tenga el mismo grosor por todos lados.
4. Hornea la masa
Cuécela en el horno, precalentado a 170º, durante 12 o 14 minutos, hasta que empiece a dorarse la superficie. Retira y deja reposar unos minutos, hasta que el bizcocho esté templado.
5. Unta con dulce de leche
Despégalo del papel con cuidado de no romperlo, ponlo sobre una mesa de trabajo y unta un lado del bizcocho con la mayor parte del dulce de leche. Enróllalo y espolvoréalo con azúcar glas.
6. Decora y sirve
Decóralo con el resto del dulce de leche en forma de hilos y sírvelo cortado en porciones.
